El cultivo la trufa negra cuenta con un gran potencial de desarrollo rural y forestal en territorio alavés. Es por ello que Neiker-Tecnalia y la Asociación de la Trufa Negra de Álava llevan a cabo el proyecto Ecotruf.
Para obtener las mejores trufas negras, resulta necesario que los cultivos se lleven a cabo con plantas micorrizadas –simbiosis entre un vegetal y un hongo que da lugar a las trufas- de la mayor calidad. En este aspecto, Neiker-Tecnalia colabora con el Centro Tecnológico Forestal de Cataluña con el fin de controlar la calidad de las plantas micorrizadas que los productores de trufa alaveses utilizan en sus explotaciones.
Este control también está dirigido a evitar que se introduzcan especies de trufa no deseadas que pueden acabar con la capacidad de explotación frutícola del terreno.
Para determinar que las plantas micorrizadas pertenecen a la especie Tuber melanosporum, los técnicos de Neiker-Tecnalia utilizan técnicas morfológicas –estudio de la forma de la planta- y moleculares –estudio del ADN-.
Mapa de las zonas truferas de Euskadi
Otro de los objetivos del proyecto es la creación de un mapa de las posibles zonas truferas del País Vasco, que cuenta con un gran potencial de desarrollo de la truficultura.
La trufa crece en asociación simbiótica con raíces de árboles como robles, encinas y avellanos, entre otros. Su cultivo contribuye a preservar la avifauna y favorece la reforestación con especies autóctonas propicias para el desarrollo de este exquisito hongo.