La marca de repostería artesana Manolo Bakes ha renovado su imagen con un vestuario diseñado y confeccionado por la consultoría textil Vranded, que ha mantenido los colores y la estética del clásico repostero con un corte moderno en los tejidos.
Para su diseño, los responsables de la firma textil han estudiado la filosofía de la cadena. "Para este reto era necesario la creación de un vestuario nuevo", explica Martín Mosquera, Director de Diseño de Vranded. Una de las principales caracaterísticas de la línea es, precisamente, una innovación lanzada por la firma: su versión actualizada de la clásica gorra ´Bakerboy Cap´, que incorpora una correa ajustable, siendo así de talla única y adpatándose también a los empleados con pelo largo.
La gorra incluye un material ligero para ganar en comodidad y que sea menos caliente, lo que permite a sus usuarios olvidarse de que lo llevan puesto. "Además, el interior es completamente personalizado, con cintas tapacosturas interiores con el nombre de la marca junto a los manolitos impresos", explica Mosquera.
Su propuesta incluye un polo de corte moderno con cuello Mao, en los colores de Manolo Bakes, con un corte moderno. Para su creación se han inspirado en la vestimenta de los pasteleros de principios del Siglo XX, a lo que se ha retocado el cuello y la manga con beige. Se culmina el detalle con el hilo rojo, segundo color corporativo, y que cose y fija los detalles de la botonera del cuello
Un mandil único y a la venta
Creado desde cero, el mandil incluye un bolsillo central personalizado con el dibujo en mosaico de los manolitos y una etiqueta personalizada diseñada con la imagen de marca. Según indica el diseñador Martín Mosquera, en este caso se ha trabajado en aunar la comodidad a los empleados con una estética atractiva. Además, se han incluido travillas que simulan las del cinturón de un pantalón, y que permiten acoplar la carrea para sujetar el mandil.
Estos delantales personalizados que estarán a la venta al público de Manolo Bakes.