Según el último informe realizado por la consultora de franquicias, Tormo Franquicias Consulting el sector de hostelería y la restauración se consolida como una de las apuestas más seguras en el ámbito de la franquicia.
Entre los aspectos más relevantes, destaca la constante aparición de nuevos formatos y operadores, una incorporación y demanda cada vez mayor y más sostenida por parte de los emprendedores e inversores, la conciencia saludable y sostenible del nuevo consumidor y la continua evolución digital que está transformando el sector.
Visión general del sector
Según estos datos, en el sector franquicias de Hostelería y Restauración operan actualmente 189 enseñas con 7.080 unidades de negocio. Todos estos establecimientos han facturado un total de 4.300 millones de euros, situando a las franquicias de comida rápida a la cabeza de la lista, con una cifra de 1.535 millones de euros de facturación total. A las franquicias de comida rápida le siguen las pizzerías, con 662 millones de euros facturados y las franquicias de cervecerías y tapas, con 565 millones de euros.
La inversión total alcanzada por todo el sector ha sido de más de 1.980 millones de euros. Las franquicias de comida rápida e italianos ocupan los primeros puestos de la lista con 901 y 244 millones de euros respectivamente, correspondientes al nivel de inversión.
Por otro lado, la creación de empleo ha visto igualmente favorecido su crecimiento con el desarrollo de 56.856 puestos de trabajo.
Facturación e inversión media
Este es uno de los sectores que presenta mayores cifras de facturación en cada uno de sus establecimientos, al mismo tiempo que la inversión inicial en términos generales es superior a la media. Destacan las franquicias de comida rápida, pizzerías y cervecerías y tapas.
En primer lugar, se sitúan las franquicias de comida rápida con una facturación media de casi 960.000 € y una inversión media de 563.161 €. Este modelo continúa su crecimiento con la incorporación de nuevos operadores y la intensificación de las actuales marcas.
En segunda posición, las franquicias de pizzerías cuentan con una facturación media cercana a los 670.000 € y una inversión media de 193.209 €. Este sector se consolida con un modelo de negocio escalable que presenta un bajo riesgo para el emprendedor dentro del ámbito de la franquicia.
Por último, las franquicias de cervecerías y tapas obtienen una cifra de 536.173 € de facturación media y casi 218.000 € correspondientes a la inversión media. Este segmento de mercado presenta una elevada competitividad, las economías de escala y la oferta más ajustada para el consumidor son clave para su éxito.
Tendencias
Las distintas tendencias se resumen en los siguientes conceptos: Digitalización Delivery, Take Away, Dark Kitchen o Cook Room, Concentración de Marcas, Más experiencia y Menos comida, El gusto por lo saludable- Healthy Food, Transparencia e información y Presencia en Redes Sociales.
Al igual que ocurre en el resto de sectores, la tecnología ocupa un papel cada vez más fundamental en este sector. Servicios de “Clic & Collet”, pago del servicio de forma virtual, necesidad de estar presentes en redes sociales, reservas on line... son algunas de las tecnologías que están despuntando en el sector y hacia donde se dirige el futuro de la restauración.
Por otro lado, el delivery y el take away impulsan las ventas de estos locales. Aunque ya llevan algunos años en funcionamiento, es ahora cuando está en auge y ya se están desarrollando conceptos derivados como las Dark Kitchen, en donde los restaurantes carecen de camareros y el objetivo es ampliar las cocinas de forma exclusiva para el servicio delivery.
Los nuevos hábitos de vida del consumidor también han influido notablemente en la renovación y aparición de locales de restauración, fomentándose el gusto por lo saludable o “healthy food”, la conciencia medioambiental, la transparencia respecto al origen de los alimentos o la nueva tendencia “Eatment”, que potencia la experiencia del comensal a través de distintas actividades de ocio.
Claves en el sector
Por último, del conjunto de estas tendencias, se desprenden las principales claves del sector de hostelería y restauración:
Dinamismo e innovación: En un sector donde impera la alta competitividad, resulta fundamental adaptarse a los cambios en los hábitos de consumo y el desarrollo continuo de nuevos productos y conceptos.
Digitalización: La restauración organizada tiene que adaptarse a las nuevas formas de comunicación y gestión de procesos. Ahora el sector está cada vez más presente en redes sociales o trabajando los nuevos servicios de delivery.
Venta a domicilio: La comida a domicilio se ha convertido en uno de los canales de venta más representativos del sector, principalmente a través de las distintas plataformas y agregadores especializados.