Para luchar contra el desperdicio de alimentos de forma eficaz es imprescindible, en primer lugar, conocer cuáles son las áreas o focos “calientes” que generan mayores ineficiencias en la empresa. De este modo, pueden establecerse protocolos de mejora adaptados a cada caso.
Bajo esta premisa, Aeoc, en el marco de su proyecto “La alimentación no tiene desperdicio” que une esfuerzos de todos los eslabones de la cadena de valor para reducir el desperdicio de alimentos ha organizado el primer taller dirigido a empresas fabricantes, distribuidoras, grandes y medianas empresas que quieran poner en marcha un plan para reducir ineficiencias generadoras de desperdicio, que contará también con la participación de Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
No en vano, la colaboración público-privada es clave para afrontar con éxito la lucha contra el desperdicio de alimentos, reduciendo un problema que sitúa a España como el séptimo país europeo que más despilfarra. La primera edición de este taller, que se celebrará el próximo 11 de abril en la sede de Educarne, contará con la participación de empresas como Caprabo, Mercadona o Tuero (Cerealto SIRO) quienes compartirán la problemática, cambios y obstáculos que han tenido que realizar en el momento de acometer sus procesos para prevenir el desperdicio alimentario.
Tras la bienvenida a cargo de un representante de la Dirección General de la Industria Alimentaria (MAPA), David Esteller hará un exhaustivo análisis de la cadena de valor de las compañías, ofreciendo recomendaciones prácticas para detectar puntos de mejora.
Seguidamente las empresas colaboradoras compartirán sus experiencias y, para finalizar, se realizará un taller práctico en el que las empresas asistentes deberán identificar y abordar conjuntamente los puntos “críticos” que pueden darse en una empresa de transformación.