Optimizar el perfil del valor nutricional de sus productos ha sido una de las metas de Erlenbacher de los últimos años, un trabajo que ha permitido reducir hasta un 10% el nivel de azúcar y grasas, respectivamente, de un total de 190 productos de su catálogo.
El director general de la empresa, Bernhard Neumeister, explica que el proceso ha sido "bastante más complicado que el desarrollo de un producto nuevo", ya que para modificar las recetas ha sido necesario cambiar la lista de ingredientes respetando el sabor.
Por ejemplo, en su Tarta de Queso y Nata con Melocotón se ha reducido el contenido de azúcar un 9,8% y se ha eliminado completamente el aceite de palma de su receta.
Además, en el desarrollo de nuevos productos se intenta, en la medida de lo posible, reducir el contenido de azúcar y grasas sin sin que la receta sea técnicamente inviable. “Hay que tener en cuenta que el azúcar no solo edulcora sino que tiene un papel importante en la elaboración de la masa que sin el azúcar no consigue la consistencia deseada”, señala Neumeister. "Lo mismo ocurre con las grasas. Las recetas de productos de pastelería fina están sometidas a unos requisitos mínimos", añade.
El cambio de hábitos alimentarios y la evolución de los gustos de los consumidores ha hecho posible la creación de otro tipo de productos que ha demostrado un mejor valor nutritivo: la gama de tartas PlacerPlus, con optiones que destacan por un alto contenido en grano integral, veganas o ingredientes como los llamados superalimentos.