Bodegas Luzón ha renovado su emblemático Altos de Luzón, un vino elaborado exclusivamente con uvas de monastrel que representa los orígnenes de esta bodega asentada en tierras jumillanas. Con su transformación, Luzón vuelve a sus orígenes y a la esencia de la DO Jumilla, en un homenaje a su identidad que se ve reflejado en su etiqueta, donde se recrea un paisaje rudo y singular, pero a su vez lleno de belleza.
La comarca de Jumilla se caracteriza por su clima árido, con una altitud media de 650 metros que provoca que la tierra sea áspera y seca, lo que marca la autenticidad de la zona y que resume el renovado Altos de Luzón.
Este vino es el resultado de un cuidadoso proceso que se inicia en la selección de los mejores racimos de y continúa con doce meses de crianza en barricas de roble americano y francés.
Altos de Luzón posee un sabor marcado, que aporta la frescura propia del clima mediterráneo, "algo único, bello y hermoso" a descubrir; mensaje incorporado en la contraetiqueta de la botella.