La CEHAT solicita al Gobierno que recoja en el real decreto que recoge el estado de alarma un nuevo anexo donde se dicte ese cierre ordenado y escalonado de los establecimientos de alojamiento turístico.
El presidente de CEHAT, Jorge Marichal, explica que, aunque la casuística de las asociaciones que integran la confederación es muy variada y ya hay muchos establecimientos que no tienen clientes, estas empresas pueden dirigirse a la autoridad laboral competente para solicitar la tramitación de su correspondiente Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por fuerza de causa mayor, una circunstancia que legalmente puede invocarse en un caso como este, y proceder al cierre de la instalación hotelera.
"Tenemos que dar un ejemplo de civismo y responsabilidad en una circunstancia excepcional y única de la que no tenemos experiencias previas. ¿Qué pasaría si los hoteles se hubieran incluido en el grupo de los establecimientos de cierre obligado por decreto?, ¿qué habríamos hecho con esos clientes?, ¿dejarlos en la calle y mandarlos a los aeropuertos incrementando el riesgo sin la garantía de un regreso seguro?", “¿cómo volverían a sus países sin una organización previa?”, se pregunta Marichal, quien insiste en que la actuación de los hoteleros españoles se rige por un ejercicio de responsabilidad.
El representante de los empresarios agradece al Gobierno que no se recogiera el cierre inmediato de los alojamientos turísticos, con el fin único de no verse obligados a echar a la calle a miles de turistas que aún permanecen en los establecimientos hoteleros, algunos incluso con residencia habitual en ellos.
"Es importante remarcar que hay establecimientos de carácter hotelero que prestan servicios básicos a personas desplazadas por motivos laborales, por lo que hay alojamientos que prestan servicios esenciales como carácter excepcional",consluye.