El 19 de marzo el Ministerio de Sanidad ha publicado en un Boletín Oficial del Estado (BOE) extraordinario la norma que obliga a todos los hoteles y alojamientos turísticos del país a cerrar sus instalaciones en el plazo de una semana o a partir del momento en el que "no dispongan de clientes a los que atender". También se ven afectados por esta disposición campings, aparcamientos de caravanas y establecimientos similares.
El Gobierno establece que "con carácter excepcional, queda permitida la prestación de los servicios de vigilancia, seguridad y mantenimiento" en todos ellos.
En el caso de aquellos hoteles que alberguen huéspedes de largo plazo o de temporada, se permite que éstos permanezcan en los establecimientos "siempre que cuenten con las infraestructuras, en sus propios espacios habitacionales". Si bien, "no podrán admitir nuevos clientes" hasta nueva orden.
Por otro lado, serán las Comunidades Autónomas quienes deban llevar a cabo las medidas que garanticen el cumplimiento de eta norma.