El sector de viviendas turísticas de Ibiza, con 3.200 casas registradas, prevé perder 18 millones de euros esta primavera como consecuencia del retraso del inicio de temporada por el coronavirus, una cantidad que podría llegar a los 31,5 millones según sus estimaciones, si en junio continúa esta situación.
"Esto nos llevaría a un escenario con unas pérdidas del 35% de la facturación anual para el sector, sin tener en cuenta además el gasto en oferta complementaria que se dejará de ingresar, al ser éste un sector que repercute parte del gasto del turista en destino en oferta complementaria (supermercados, restaurantes, rent a cars, taxis, etc.)", advierte el colectivo que las representa, AVAT.
Ante estas circunstancia, la agrupación ha decidido poner en marcha una serie de medidas con las que poder sostenerse tras pasar la crisis sanitaria. Una de las primeras inicitivas en la que participa es la campaña #Moveyourspring, con la que se pretende alargar la temporada, incentivando los cambios de reserva del principio de temporada a los meses de octubre y noviembre. En la misma línea, también se fomentan campañas de flexibilización de las condiciones de reserva y cancelación.
Asimismo, "se está trabajando en unos protocolos que garanticen la absoluta desinfección, limpieza y confort de nuestras villas para que, cuando nuestros huéspedes lleguen, éstos estén completamente a gusto, así que queremos transmitir un mensaje de tranquilidad y seguridad".
AVAT trabaja con PIMEEF, otras asociaciones de la isla y las administraciones locales, así como con el Consell d’Eivissa, para "poder superar esta crisis de la manera más satisfactoria posible".