La mitad de los hogares españoles prevé que su situación económica empeore tras la crisis del COVID-19. Así lo señala el primer barómetro Consumo y compra dentro y fuera del hogar, publicado por AECOC Shopperview en colaboración con la agencia 40db.
El estudio indica que seis de cada 10 encuestados está esperando a que acabe el confinamiento para volver a los bares y restaurantes, pero el 30% apunta que gastará menos en alimentación fuera del hogar tras el confinamiento, mientras que el 44% de los encuestados asegura que reducirá su inversión en entregas de comida a domicilio.
Cambios en el consumo
Ligado a la contención del gasto, el factor precio cobrará mayor importancia para el 61,3% de los consumidores y el 55,4% asegura que comprará más productos para cocinar en casa. En este sentido, la mitad de los encuestados aspira a tener una alimentación más saludable en el futuro, por solo un 10% que aumentará su gasto en productos premium tras la crisis.
Además, el hecho de priorizar la proximidad a la hora de escoger los establecimientos de compra está llevando a los consumidores a descubrir nuevas tiendas de proximidad. Así, el 56,5% de los encuestados afirma que seguirá comprando en los locales más cercanos a su hogar, y casi la mitad reconoce que podría ser infiel también a sus marcas de consumo habituales.
Del mismo modo, el 20,2% de los compradores se ha iniciado en las compras online para productos de gran consumo y el 17,1% de los encuestados asegura que comprará más a través de este canal una vez acabe el confinamiento.