La nueva identidad visual de Schär se centra en el uso del tono amarillo inherente a la marca, que es fácilmente reconocible; así como del logotipo rojo, también asociado a Schär, y que ahora es más prominente y constituye una parte esencial del packaging. Además, se han introducido nuevas variantes de color para permitir a los consumidores distinguir mejor cada una de sus categorías de productos.
Así, los colores marrón, verde y azulsirven para diferenciar la variedad de tipos de pan que la marca incluye en su oferta: multigrano, vital y clásicos. Asimismo, se prevé que en los próximos meses se introduzcan nuevos cambios en otras gamas de productos, incluyendo nuevos desarrollos de productos, como parte de una estrategia de despliegue apoyada y ejecutada a nivel mundial por la agencia italiana, ArteficeGroup.
El nuevo envase incorpora además un código QR, que los consumidores pueden escanear para conocer la historia de Schär, su gama de productos o incluso dar su opinión al equipo de atención al cliente.
Schär también ha plasmado en su nuevo packaging su compromiso con la sostenibilidad: el embalaje también incluye información adicional sobre la eliminación de residuos para animar a los clientes a reciclar de forma adecuada. Actualmente, el 35% de sus embalajes pueden ser reciclados, aunque el objetivo es alcanzar el 100% de reciclabilidad.