El Grupo Arzábal se ha unido a Just Eat para que los usuarios disfruten de la alta cocina en su casa. El grupo cuenta ya con otros cuatro restaurantes en la capital: Arzábal Market en el Mercado de San Miguel, El Jardín de Arzábal en el Museo Reina Sofía en Madrid, Kirikata, taberna japonesa, y Ón, un nuevo concepto de delivery para empresas.
En la carta a domicilio de Arzábal hay clásicos como la ensaladilla rusa con ventresca, el arroz con setas y trufa, las pochas con almejas, las carrilleras o las croquetas, "las reinas de la casa" según los dueños.
La propuesta de Kirikata comparte el concepto de taberna pero con fragancias de la cocina japonesa, ofreciendo niguiris, sashimis, uramakis, makis, tartares y arroces cargados de sabor.
Ambas ofertas a domicilio se complementan con varios menús para poder disfrutar con familia y amigos, y una extensa y novedosa carta de vinos, cavas y champagne.
"Las botellas de champán las mandamos como las cervezas, envueltas en hielo pilé. Queremos que llegue todo de la mejor manera posible". Cada envase está termosellado para proteger el interior y lleva una etiqueta con los alérgenos. "Cuidamos los detalles. Nos interesa la experiencia de cómo le llega al cliente y queremos controlarlo todo", dice Álvaro Castellanos, Co-Propietario de Grupo Arzábal.
La experiencia gastronómica culmina con una amplia selección de postres, entre los que destacan clásicos como la torrija, el tatin de manzana, el flan de queso, el fondant de chocolate y del lado japonés una variedad de mochis de varios sabores.
"Nuestro objetivo es ofrecer la mayor variedad y calidad gastronómica a nuestros usuarios. Compartimos con Álvaro e Iván el firme compromiso de esforzarnos para que el delivery sea una experiencia a la altura del servicio en mesa. En ese sentido, es todo un honor que el Grupo Arzábal haya escogido a Just Eat para hacer llegar su alta cocina a los hogares madrileños", afirma Patrik Bergarache, Director General de Just Eat en España.