El pasado 31 de marzo se inauguraba en la localidad de Las Palmas de Gran Canaria, Gran Canaria una nueva cocina fantasma de Sushimore. La marca, que suma un total de 28 establecimientos en toda España, arterriza en el archipiélago canario ofreciendo su servicio delivery de comida japonesa, "sin olvidar el modelo de consumo tradicional, en el que el comensal podrá degustar la comida y pasar un tiempo de ocio en un espacio con identidad propia cuando mejore la crisis sanitaria", explica Roger Antelo, CEO de la firma Gadea Group, grupo inversor de la franquicia.
Un nuevo modelo de negocio con capacidad de crecer en las islas
Con esta apertura, se ha dado empleo a cuatro a personas en las Palmas, pero además, según el responsable de expansión de Sushimore, Carlos Núñez, "se impulsará a explorar nuevos segmentos de negocio y a consolidar una nueva oferta gastronómica que no había llegado al archipiélago. A raíz de esta situación, el modelo de emprender a través de una franquicia se ha convertido en una de las mejores maneras de solventar la actual crisis sanitaria y económica", mantiene.
El modelo de negocio de Sushimore se basa en un córner pensado para establecimientos ya abiertos, que "permitirá a muchos hosteleros y profesionales de la restauración, a mantener sus negocios activos de manera rentable". En el caso de los emprendedores que buscan el autoempleo, los modelos de negocio propuestos por Sushimore, restaurante tradicional o modelo cocina fantasma, son las vías propuestas por la marca para generar ingresos al mismo tiempo que consolidan su propio negocio "con un gran potencial de crecimiento en su zona mediante acuerdos con terceros", explican los responsables de la franquicia.