De media, las empresas turísticas españolas están facturando actualmente alrededor de un 40 % de lo que lo hacían en 2019. Sin embargo, el fin del estado de alarma está estimulando otra vez un sector clave en la economía del país. “La mayor parte de operadores creen que este año podrían alcanzar en torno al 60% o 70% de facturación de los meses fuertes, con la recuperación de la movilidad gracias al avance de la vacunación”, explica Felipe García, abogado y socio del despacho de abogados Círculo Legal Madrid.
Los empresarios son muy cautos en cuanto a números de recuperación del turismo se refiere, pero se piensa que, si todo va bien, todavía se pueden “salvar los muebles”. “En estos momentos, podemos decir que todo está en el aire, las empresas observan de refilón y con preocupación los niveles de contagio y hay miedo todavía a una nueva ola que provoque nuevas restricciones de movilidad”, considera el abogado.
“Desde la finalización del estado de alarma se ha producido un pistoletazo de salida en cuanto a las contrataciones de alojamientos y paquetes”, señala el abogado. “La limitación de la movilidad era un lastre para el sector y una barrera física y mental para los viajeros nacionales e internacionales”, añade.
Falta de ayudas para el sector del turismo
En este sentido, el experto considera “vital” la aportación del mercado internacional al sector y lamenta la “falta de ayudas, comparando con nuestros competidores”. El abogado considera que las administraciones públicas no están ayudando lo suficiente a un sector “que aporta entre el 12 y el 17% del PIB” y que la inversión para adaptar las instalaciones a las recomendaciones sanitarias, así como combatir las pérdidas “está recayendo en los empresarios”.
"Las ayudas siguen sin llegar, ni siquiera ha habido una prioridad de vacunación en el personal del turismo, como ha pasado en Turquía”, señala Felipe García, quien considera que “las decisiones que se tomen estos días serán vitales para el turismo en los próximos meses”.
Desescalada laboral en turismo tras el fin del estado de alarma
La recuperación del turismo tendrá su efecto en la desescalada laboral del país, que está directamente ligada a la suerte de la prórroga de los ERTE, ayudas ampliadas hasta el 30 de septiembre.
“A medida que las empresas vayan generando una facturación más elevada y en línea con el 2019, se irán incorporando más trabajadores nuevos” afirma el abogado, quien añade que “no hay que olvidar que las empresas han tenido que extinguir en todo este tiempo muchos contratos de trabajo”.
La empresa destaca la capacidad de resistencia de las empresas tanto del sector turístico como en general, para capear el temporal y pronostica una recuperación total a un máximo de dos años vista. “Con un poco de suerte, se puede hablar de recuperación a finales de 2022, aunque los estudios más fiables hablan de una recuperación plena para el 2023”, comenta Felipe García.