Iñaki Unsain, especialista inmobiliario de Barcelona, prevé que, durante el período estival, "un 60% de los pisos que se traspasaron al alquiler temporal o convencional volverá al alquiler turístico en los próximos 6 meses", ya que, ante la falta de visitantes, el 40% de los propietarios restantes apostarán todavía por el alquiler convencional. En este sentido, el experto advierte que la recuperación del mercado del turismo, estudiantes y ejecutivos será clave para la recuperación de los precios de alquiler de larga duración.
"Durante la pandemia los propietarios han optado por dos posibles soluciones. Unos han puesto sus pisos turísticos en alquiler temporal, con plazos de más de un mes y menos de un año; otros han decidido pasarlos al alquiler convencional, donde el plazo mínimo de obligado cumplimiento para el propietario es de 5 años si es persona física y de 7 si es persona jurídica. Los primeros volverán a poner los pisos en alquiler turístico en cuanto la movilidad se reanude y venzan los contratos temporales. Sin embargo, los segundos lo tienen más complicado, ya que el contrato les ata a largo plazo", ha destacado el personal shopper inmobiliario.
Incrementos de los precios de alquiler en Barcelona por el empuje del turismo
Este aumento de la demanda, según Unsain, supondrá en los próximos meses un incremento de los precios del alquiler, que aumentarán sus rentas entre un 10 y un 12%, situándose el alquiler de un piso medio de 80 m2 en 1.350 euros al mes, unos 150 euros más que el año pasado. El posible incremento hace que sea un buen momento para invertir en las zonas con mayor rentabilidad. Esto, unido a la necesidad de un alquiler solvente hace que distritos como Ciutat Vella, Eixample, Gràcia, Les Corts o Sant Martí sean los distritos más buscados por esta demanda por su ubicación céntrica, la calidad de los servicios y un potente eje social y comercial.