Bodegas Luzón define a su nuevo vino Mindoro como "insólito y sorprendente". Este nace con una vendimia manual nocturna para evitar, gracias a las bajas temperaturas, una fermentación prematura. Después del despalillado en la bodega pasa a depósitos de acero para su fermentación. Cuando la uva alcanza su grado óptimo se vuelca a barricas de roble francés, con un secado de 48 meses, donde termina de realizar el proceso en reposo, con sus lías, por un periodo de 6 meses antes de clarificar y embotellar.
Este nuevo vino tiene un carácter fresco, floral y con notas de piña en nariz. Con una sorprendente voluptuosidad, es cremoso y aporta un postgusto que en boca resulta largo y envolvente.
Por su parte Luzón Dulce, "sigue el camino de la irreverencia, que va a contracorriente al tratarse de un vino dulce elaborado con uvas sauvignon blanc en la tierra de la monastrell", describen sus creadores. Una propuesta innovadora que comienza su recorrido en una vendimia tardía, donde los frutos han conseguido una mayor concentración de azúcar y madurez. Tras la vendimia y el despalillado pasa a depósitos de acero donde realiza una fermentación alcohólica durante 12 días, para después ir a barricas de roble francés donde realiza una crianza durante un periodo de 8 a 10 meses.
Luzón Dulce tiene un aroma complejo a vainilla, miel y corteza de naranja. Notas de azahar y caramelo que notamos en nariz y especias como la pimienta que descubrimos en boca.