Encuadrado en la iniciativa mundial de las Naciones Unidas, “Unidos por las Ciudades Inteligentes y Sostenibles (U4SSC)”, Minsait y Segittur ponen el foco en la digitalización para consolidar la competitividad y sostenibilidad del sector, donde la planificación y la gestión integrada del turismo asegurará su resiliencia.
El turismo inteligente es el acto de los agentes turísticos que usan tecnologías y prácticas innovadoras para mejorar la gestión de los recursos, rentabilidad y la sostenibilidad. Por eso, este informe se muestra como el punto de partida para la nueva visión del turismo, dejando claras las premisas necesarias para avanzar hacia este nuevo modelo de turismo.
La implementación de nuevas plataformas tecnológicas que permiten una nueva gestión integrada, la adopción de un modelo marco para modernizar los destinos, así como el desarrollo de estándares y normas, son algunas medidas que plantea el documento para asegurar el papel del turismo como motor de crecimiento económico.
“El turismo inteligente se ha transformado en una herramienta eficaz para evaluar, medir y gestionar el turismo, que facilita la toma de decisiones basadas en datos sobre cuestiones clave como las infraestructuras, la capacidad de transporte, el alojamiento, la movilidad, la gestión de los recursos naturales y culturales o la propia participación de la comunidad en el turismo”, declara Alberto Bernal, director de Territorios Phygital en Minsait.
Así, el informe pone de relieve la importancia de adoptar un modelo de Destino Turístico Inteligente que gire en torno a ejes de desarrollo concretos: gobernanza, innovación, tecnología, accesibilidad y sostenibilidad, con la finalidad, entre otras cosas, de fomentar la participación regular de todos los agentes del sector implicados.
Para su consecución, es indispensable el desarrollo e implementación de estándares y normas que pongan en valor las características y recursos de los destinos turísticos. En este sentido y a nivel nacional, la Asociación Española de Normalización, UNE, es la entidad encargada del desarrollo de dichas normas.
Junto con estas medidas, la puesta en marcha de Plataformas de Destinos Turísticos Inteligentes posibilita dar respuesta a los retos del sector de forma integrada. Por ejemplo, a través de un sistema basado en datos que haga uso de modelos de inteligencia distribuidos que extraiga la información lo más cualitativamente posible.
Según el informe, todas estas medidas motivarán la evolución hacia un ecosistema de innovación abierto mediante nuevas propuestas y soluciones.
Transformar el sector turístico gracias a la digitalización
Además, el sector turístico debe servirse de tecnologías como el IoT, la realidad virtual, la ciberseguridad o la multicanalidad si desea llegar a unos turistas cada vez más digitalizados, quienes reclaman una oferta renovada y personalizada. Esto facilita que los diferentes agentes lleguen a los usuarios finales de un modo más directo y sencillo, y les ofrezcan experiencias más atractivas, aumentando por tanto la seguridad y rentabilidad mientas se impulsan las economías locales.
“El Informe constata cómo una planificación y gestión integrada del Turismo permite avanzar hacia un modelo capaz de garantizar la resiliencia del sector en cualquier escenario, así como su competitividad y sostenibilidad”, explica Alberto Bernal.
La apuesta de Minsait por el Turismo Inteligente va en línea con su oferta Phygital de soluciones integrales para conectar el mundo físico y el digital (OT/IT), con la que da respuesta a la acelerada transformación que está experimentando la gestión del mundo físico mediante la digitalización.
Uno de sus principales proyectos es “Las Palmas Inteligencia Azul”, centrado en mejorar la eficiencia en la gestión sostenible de los servicios urbanos en Las Palmas de Gran Canaria y brindar una mejor calidad de los servicios al ciudadano y el medio ambiente, con especial atención en sus playas, uno de los principales pilares de la actividad turística. Otro de sus proyectos más destacados se sitúa en Italia, como socio clave en la digitalización de los Museos Vaticanos, ya que integra sus servicios para mejorar la protección de las obras y la seguridad de los visitantes.
