El Kombucha Lab de Flax & Kale en Barcelona se convirtió a finales de febrero en un decorado bucólico engalanado con plantas de té y scobies, dos de los principales ingredientes de la kombucha, además de espejos, grandes leds y luces de neón y carteles inspiradores para celebrar el día mundial de esta bebida milenaria.
Mar Barri, Co-fundadora y responsable de Sostenibilidad y Calidad, estuvo compartiendo con los asistentes el origen de la kombucha, además de explicar la diferenciación de las kombuchas de Flax & Kale y la intervención artística en el Kombucha Lab.
Cómo se elabora la kombucha de Flax & Kale
Para elaborar su kombucha, en Flax & Kale seleccionan los tés de mejor calidad y además controlan la primera fermentación hasta conseguir que los azúcares sean reabsorbidos.
Seguidamente, saborizan sus kombuchas con zumos cold-pressed, que hacen que el producto tenga un sabor mucho más dulce y afrutado.
El resultado que obtienen es una bebida de lo más saludable gracias a las vitaminas, los probióticos y que es baja en azúcares y calorías, una auténtica alternativa a los refrescos azucarados.
Kombucha Lab, el laboratorio de Flax & Kale
Las kombuchas de Flax & Kale se elaboran en el laboratorio de la compañía ubicado en el centro de I+D+i en Lleida, dentro de la planta que se va a convertir en las instalaciones de kombucha más modernas del sur de Europa gracias a la entrada de inversión del pasado noviembre.
Estas bebidas fermentadas a base de té, presentadas como alternativa saludable a los refrescos tradicionales, han crecido un 153% en el último año, a cierre de 2022 vs cierre 2021.
Kombuchas en 9 sabores distintos
Actualmente, la gama de kombuchas de Flax & Kale se compone de 9 combinaciones de sabor aptas para todo tipo de paladares, entre las que se encuentran: Dragon Lemonade, Orange Fantasy, Lemon Fantasy, Kombucola, Wonder Berry, Blue Mojito, Mother Africa y Symbiotic Passion.
Todas ellas se comercializan en botellas de cristal 100% reciclables y reutilizables.