Los I Premios Nacionales Inclucina nacen con la vocación de servir de trampolín para la inserción profesional de alumnos de cocina con discapacidad intelectual y tengan una importante repercusión nacional, de ahí que su presentación fuera en uno de los eventos gastronómicos más importantes del año, Madrid Fusión.
La chef Elena Arzak, presidenta del jurado, fue madrina de la VIII Gala Benéfica del Club Inclucina, que se celebró en diciembre en el Teatro de las Esquinas de Zaragoza, y tiene una implicación "absoluta" con el proyecto marcada también por su experiencia con personas con discapacidad intelectual en su restaurante. "Marcando su función, lo que pueden llegar a conseguir, y teniendo en cuenta sus capacidades como las de otros trabajadores, hacen el trabajo de cualquier persona", destaca Arzak.
En esta idea han insistido el resto de los participantes en la presentación, desde el presidente de honor del Club Inclucina, Ramsés González, al presidente de Atades (Asociación Tutelar Aragonesa de Discapacidad), Antonio Rodríguez, y el presidente de Hostelería de España, José Luis Yzuel.
Final en diciembre en Zaragoza
Los centros formativos presentarán a sus candidatos, que tienen que ser mayores de edad, además de estar cursando o haber realizado formación profesional reglada de cocina en escuelas de hostelería y centros públicos, privados o concertados de todo el territorio nacional.
En una primera fase, todos los participantes deberán reinterpretar la misma receta que recibirán de la organización junto con instrucciones. Presentarán una video-receta, acompañada de la ficha técnica de ejecución. El jurado seleccionará a los doce candidatos que pasen a la final.
La gran final nacional y la entrega de premios se celebrará en diciembre en Zaragoza, en el Teatro de las Esquinas,. Para los tres alumnos ganadores habrá "importantes premios económicos", así como para las escuelas de hostelería o centros responsables de su formación. Además de un diploma acreditativo, todos los alumnos finalistas recibirán un contrato de prácticas laborales remuneradas en un reconocido restaurante de su provincia.
Formación en cocina
Pero ese será el colofón de estos galardones. Antes, Lourdes Plana ha hecho hincapié en el objetivo final de esta iniciativa: el desarrollo profesional de estudiantes de cocina con discapacidad intelectual de forma reglada. En definitiva, conseguir su inserción profesional en empresas de hostelería.
La chef del restaurante Arzak, por su parte, se ha mostrado convencida de que estos galardones “van a servir, sobre todo, para que los participantes den rienda suelta a su imaginación y preparen excelentes platos”. Por último, ha aprovechado para reclamar que la formación en cocina “se integre en el sistema educativo”.
El presidente de Atades, Antonio Rodríguez, le ha agradecido a Elena Arzak “su gran implicación”, así como el apoyo de Hostelería de España y del Club Inclucina. “Para Atades estos premios significan mucho -ha comentado-, ya que nos ayudan a visibilizar y a poner en valor las capacidades de nuestros alumnos y la formación que se imparte en el colegio de educación especial Atades-San Martín de Porres”. Además, el presidente de Atades se ha mostrado convencido de que la primera edición de estos premios “va a ser un éxito”.