Anecpla augura un verano de importantes plagas de cucarachas y hace un llamamiento para potenciar las acciones de prevención. El director de la asociación Jorge Galván, explica que la preocupante situación se debe al aumento de las temperaturas a consecuencia del cambio climático, "lo está provocando que insectos como las chinches o las cucarachas, en este caso, aceleren exponencialmente su ciclo vital".
Está científicamente demostrado que, a partir de los 28ºC las cucarachas, entre otros muchos insectos, multiplican su velocidad de reproducción. "Dado que en los últimos años se vienen alcanzando temperaturas cada vez más elevadas, el calor llega en plena primavera y no termina hasta bien entrado el otoño las poblaciones de cucarachas no han hecho más que ampliarse", reconoce Galván.
A este factor se le suma el hecho de que las cucarachas han sufrido mutaciones genéticas aleatorias en los últimos años, lo que ha provocado que muchas generen resistencia a los biocidas convencionalmente empleados para su control. "Es más, las aversiones a estos productos que otros tantos están desarrollando, cada vez se hace más difícil el control de las plagas de cucarachas", apunta el representante de Anecpla.
Prevenir la presencia de cucharachas en hoteles y restaurantes
Para evitar llegar a los casos más extremos en los que ya se pueda hablar de “plaga”, Anecpla ofrece una serie de recomendaciones con el objetivo de prevenir en la medida de lo posible la presencia de cucarachas.
- Mantener la limpieza y evitar dejar restos de comida y residuos.
- Evitar cualquier fuga de agua y otras áreas de humedad.
- Sellar grietas, agujeros y hendiduras.
- Mantener el orden en el almacenamiento de productos.
- Utilizar contenedores de basura con tapas herméticas.
- Realizar mantenimientos periódicos por parte de profesionales de Sanidad Ambiental.
¿Qué riesgos supone la presencia de cucharachas en la hostelería?
Las cucarachas ejercen como depósitos de bacterias y virus que propagan debido a sus hábitos insalubres -comer carne cruda y heces de animales- y los lugares en los que habitan -basuras, alcantarillas, papeleras…-. Por tanto, su principal riesgo es la expansión de bacterias y virus nocivos capaces de transmitir importantes enfermedades a las personas, como la salmonelosis o la disentería.
La Blattella germanica (cucaracha del café, rubia o alemana), la Blatta orientalis (cucaracha negra) y la Periplaneta americana (cucaracha americana, conocida como la “súper-cucaracha” por su tamaño) son las especies más comunes de cucaracha en nuestro país. “El control de este insecto ha de ser inmediato desde el mismo momento de su detección”, alerta Galván.
El director general de Anecpla alerta de que, ante una plaga de cucarachas, no se dude en ponerse en contacto con profesionales ya que se trata de la única opción posible para acabar con este tipo de casos. Así lo explica Galván: "es fundamental llevar a cabo un diagnóstico específico del caso concreto en primer lugar. Sus resultados son los que van a condicionar que se aplique un tratamiento u otro y, en función de los resultados que se vayan observando, realizar los cambios que se consideren necesarios".