Mahou San Miguel ha desarrollado el primer grifo de cerveza en España fabricado a partir de un subproducto del propio proceso cervecero. Esta innovación, presentada en la feria HIP, Hospitality Innovation Planet, en Madrid, refuerza el compromiso de la compañía con la sostenibilidad y la economía circular.
El nuevo grifo cuenta con una carcasa elaborada a partir de bagazo, un residuo orgánico que se obtiene tras el prensado y filtrado del mosto de la cerveza, combinado con PLA, un polímero biocompostable derivado de la fécula de maíz, la remolacha o el trigo. La fabricación de esta cubierta se ha realizado mediante tecnología 3D, en colaboración con LowPoly, empresa especializada en diseño sostenible y fabricación digital.
El resultado es una carcasa 100% reciclable y circular, con un diseño innovador y adaptable a cualquier establecimiento hostelero. Con esta iniciativa, Mahou San Miguel busca extender la solución a sus 150.000 instalaciones en España.
Benet Fité, director de Calidad, I+D y Medio Ambiente de Mahou San Miguel, destaca: "El grifo de bagazo es un claro ejemplo de nuestro compromiso con la innovación y la sostenibilidad. Más allá del resultado, lo verdaderamente disruptivo es el proceso: hemos creado una cadena de aprovechamiento que convierte un residuo de la producción cervecera en una solución tangible para nuestros clientes, aportando valor a toda nuestra cadena de suministro”.
Este nuevo desarrollo forma parte de la estrategia de Mahou San Miguel para dar una segunda vida al bagazo, del que genera 192.000 toneladas anuales en sus centros de producción. La compañía ya trabaja en otros proyectos para su reutilización, como la fabricación de harina de bagazo, etiquetas de papel o cubiertos comestibles.