Cuando los gerentes de Tarongino, Guillermo y Gonzalo Antelo, comenzaron a vender online cítricos ecológicos bajo la marca Naranjas Ché, siendo una de las primeras empresas en hacerlo, fueron más allá y elaboraron un vino creado a partir de la fermentación natural de tres variedades de fruta: naranja, clementina y sanguina.
Ahora lanzan su novedad: Tarongino de pomelo, un nuevo sabor de este vino de baja graduación (sólo tiene 7º) y textura fina, que "soprende por su sabor intenso, con un toque amargo que refresca y recuerda ese cítrico con tantas propiedades y gran versatilidad en la cocina como es el pomelo, aunque poco utilizado aún”, señala Guillermo Antelo.
Sus creadores recomiendan maridar Tarongino con aperitivos, como lo hace un vino blanco, o a la hora del postre (ideal con chocolate puro). Pero también en comidas ligeras o mariscos.
Tarongino también es ideal como copa, de hecho, expertos recomiendan mezclar la variedad sanguina con tónica de Yuzu, de la cual resulta un sabor de lo más exótico.