El Pastel Crujiente de Yogur y Mango destaca por su cremosa nata, refrescante yogur y el agradable sabor agridulce del mango, que lo convierten en el postre ideal del verano. Los trozos de finas galletas entre dos capas de bizcocho de almendra le dan su especial textura crujiente. De esta forma, y junto con el relleno, se produce una mezcla de texturas en una muy interesante combinación de sus diferentes consistencias.
Con nata fresca: un relleno suave y ligero
Para su nuevo Pastel Crujiente de Yogur y Mango erlenbacher utiliza nata fresca de primera calidad. Recien montada aporta una consistencia suave y ligera y un sabor cremoso.
Con su decoración en espiral de trozos de mango y su relleno arremolinado de yogur y nata este pastel parece recien hecho por el confitero y también sabe así. Y es que en esta fábrica alemana experta en pasteles, tartas y postres congelados se hacen todavía muchos trabajos a mano, como en una auténtica confitería artesanal. Además, la empresa prescinde de cualquier aditivo que debe ser declarado, de conservantes o grasas y aceites hidrogenados. Solo se emplean aromas naturales.
El Pastel Crujiente de Yogur y Mango tiene un tamaño de 28 cm de diámetro y pesa 2,6 g. Se distribuye congelado, listo para servir y sin cortar. Erlenbacher propone cortar en 16 porciones.
