La importancia de las amasadoras en el día a día de los panaderos y de la panificación es imperiosa y las exigencias que el propio mercado y la industria alimentaria anhela son complejas.
Es esencial para compradores y usuarios, inversores y profesionales de los sectores alimentarios analizar y ponderar las amasadoras industriales a partir de varios criterios que sintetizamos:
- La facilidad en el manejo frente al uso de diferentes operadores como sucede con la industria española
- La versatilidad en la producción de varios tipos de masas que divergen en ingredientes y niveles de hidratación como el pan de barra, el pan de cruz y la hogaza
- La flexibilidad en la cantidad producida, ya sean pequeñas o grandes cantidades, respondiendo a los nichos y pequeños grupos de consumidores
- Los beneficios y optimizaciones de tiempos en el amasado, proporcionados por la rapidez del trabajo y por la posibilidad de programación de tiempos y velocidades
- Los consumos de energía más eficientes que generan mayor competitividad en el mercado y garantizan buenos niveles en el uso de la energía como las nuevas economías obligan
- La facilidad en el lavado de los equipamientos y en el mantenimiento técnico de los mismos, así como la garantía de servicio técnico rápido y capacitado en caso de asistencia
- Las obligaciones legales definidas para las amasadoras industriales y para las empresas fabricantes tal como las tapas de protección de las artesas que limitan la propagación de polvo.