Con su chispeante burbuja y su delicado color rosa, El Gaitero Rosé pretende "ser la reina de cualquier festejo, pero también de esos pequeños grandes momentos cotidianos, como, por ejemplo, descorchar una botella para disfrutar, entre risas, con amigas..."
Para elaborarla se han elegido las manzanas más dulces que, al contacto de la piel de la fruta, dan como resultado una sidra semidulce con este atractivo tono, muy fácil de beber, y con un aroma fresco a manzana y cítricos.
Su entrada en boca es ácida y tiene un final dulce y largo, lo que la convierte en la opción ideal para tomar en un aperitivo o para acompañar una comida.
El Gaitero Rosé significa origen y, también, fidelidad a sus raíces. Por eso su etiqueta dibuja la Ría de Villaviciosa, donde se encuentra la bodega desde su creación hace más de 130 años, invitando así a conocer el lugar en el que nace y rindiendo un tributo a su tierra.