El big data se entiende como la gestión y análisis de grandes cantidades de información que puede o no estar estructurada.La conversión de estos datos en información útil facilita la toma de decisiones en las empresas. Por este motivo, ayuda a entender mejor a los clientes respecto a los productos o servicios que se les ofrece.
La velocidad es otro de sus puntos fuertes, ya que las soluciones big data permiten recibir y procesar los datos con rapidez, lo que agiliza la toma de decisiones. Este ahorro de tiempo no tiene consecuencias negativas en la veracidad y el valor de los datos obtenidos. “La confianza, calidad y fiabilidad de la información resultante son sólo algunas de las ventajas que tiene el Big Data para una correcta gestión empresarial”, asegura Sonia.
Fruto de la relevancia de este fenómeno ha surgido una profesión: el analista de datos. Los candidatos demandados por las empresas suelen ser personas con formación en el ámbito de las Matemáticas, Estadística, Informática o Telecomunicaciones. “Es más difícil de lo que a priori pueda parecer, encontrar a gente que sepa extraer información útil y relevante gracias a ingentes cantidades de datos” advierten desde VASS.