El Consejo Regulador de la DOCa Rioja ha calificado como "muy buena" la cosecha de 2021. Así lo expresó el director del Órgano de Control del Consejo, Pablo Franco, en la sesión plenaria celebrada a finales de abril, en la que alabó "las favorables condiciones meteorológicas que sin duda han condicionado la maduración y han dado lugar a un final de ciclo que no podemos calificar de otra manera si no brillante; la extensión del periodo de la vendimia ha favorecido a una maduración fenólica sin aceleración y a una recolección selectiva”, apuntó.
La valoración técnica se ha realizado a partir de 5.025 muestras recogidas entre diciembre de 2021 y febrero de 2022, sometidas a un análisis físico - químico y a una cata posterior en la que ha intervenido un panel formado por 120 profesionales.
Por colores, los vinos tintos destacan por la intensidad de su color, la complejidad del aroma y por su capacidad para vincular sus matices a la tierra de Rioja. "Su carga polifenólica dota a esta tipología de vino con un gran equilibrio y en la estructura sus taninos de enorme potencial enológico ponen de relieve la extraordinaria maduración de la cosecha".
Por su parte, tanto blancos como rosados están marcados por su "innegable" capacidad de evolución y de mejora; "la excelente definición aromática permite percibir una buena frescura y un equilibrio en la acidez". Analizando de forma independiente, los vinos rosados continúan con la tendencia de abrir el color hacia notas más claras donde priman los aromas florales. Los blancos, por su parte, "continúan sorprendiendo y alcanzan una identificación y personalidad única".
En palabra de Fernando Ezquerro, presidente del Consejo Regulador, “los resultados obtenidos en la añada de 2021 ponen en valor el excelente trabajo realizado por los viticultores y bodegueros de la Denominación y ensalzan la singularidad, diversidad y los más altos estándares de exigencia que determina el carácter diferenciador de Rioja en el mercado”.