Los cheesecakes veganos de Erlenbacher, Creamy Raspberry y Creamy Blueberry, se han llevado un total de tres estrellas en el Superior Taste Award del International Taste & Quality Institute (iTQi, Instituto Internacional de Sabor y Calidad) de Bruselas.
Estas tartas han sido valoradas por alrededor de 200 chefs y sumilleres, que conceden estos premios a partir de una cata a ciegas valorando la primera impresión, el aspecto, el olor, el sabor y la textura.
En concreto, el jurado del International Taste & Quality Institute que las alternativas de queso puramente vegetal tienen un sabor especialmente cremoso y complementan a la perfección los preparados caseros de arándanos y frambuesas. "Los arándanos y frambuesas esparcidos a mano por encima proporcionan el efecto visual sorpresa", resaltan.
Son dos tartas deliciosas con las que hosteleros y restauradores pueden endulzar el día a sus huéspedes, no solo a los veganos.
- El cheesecake Creamy Blueberry tiene una base de masa quebrada con una suave nota a avellanas. Relleno de capas cremosas, azul y blanca, terminado con nuestra propia elaboración de frutas de arándanos. Encima hay más arándanos repartidos a mano.
- El cheesecake Creamy Raspberry destaca por sus gruesas gotas de preparación de frambuesa de nuestra propia elaboración incrustadas en el cremoso relleno de tarta de queso. Para terminar, una rica cobertura de aromáticas frambuesas.
Manejo fácil, descongelación rápida
Los cheesecakes veganos son fáciles de manejar. Están precortados en 14 porciones que se pueden extraer de la caja individualmente. De este modo, el hostelero puede calcular exactamente según sus necesidades. La tarta entera se descongela en el frigorífico en unas 10 horas, una porción individual se puede descongelar incluso en el horno.