Tras este lanzamiento está Pascual Innoventures, cuyo director, Gabriel Torres, explica que "con Mica Te Falta Campo estamos dando un nuevo paso adelante en nuestro compromiso con los productos de proximidad y la economía circular. Una cerveza rural con personalidad propia que defiende lo local y el origen de los ingredientes que la componen".
La cerveza se produce con cebada fresca cultivada en Fuentenebro, una pequeña localidad de la provincia de Burgos, y una vez terminada su elaboración, el residuo de grano restante se devuelve a su lugar de origen, donde se utiliza como alimento para el ganado local.
La variedad rubia se distingue por su color dorado claro, que conserva su carácter natural sin filtrar; y por su sabor, notablemente agradable, gracias a los lúpulos típicos de una cerveza Pilsen y matices de amargor nobles.
Por el otro, la variedad tostada se caracteriza por su color cuarzo, con sutiles aromas florales y toques de caramelo, propios de la Amber Ale. Este tipo de cerveza es suave, fácil de beber y destaca por su excelente calidad.
Cultivo propio de lúpulo
Además, Cerveza Mica ha dado este año otro paso adelante cultivando su propio lúpulo, una producción local que esperan doblar para 2024. Este tipo de lúpulo tan especial está proporcionando unos matices únicos a todas sus cervezas.
Mica Te Falta Campo está disponible para hostelería a través de Qualianza, la distribuidora del Grupo Pascual.