Los representantes de los hosteleros de las diferentes provincias del país han participado en un acto simultáneo en el que se ha trasladado al Gobierno un manifiesto con las medidas defendidas por el sector (descargar al final de esta noticia) para salvar la actividad tras el COVID-19.
La iniciativa, que ha contado con el apoyo de Hostelería de España, se ha acompañado con la campaña #SiéntateConLaHostelería, con la preparación de varias mesas de terrazas en distintos lugares emblemáticos del país en las que se podía leer el cartel Mesa reservada para el diálogo con el Gobierno, como símbolo de la predisposición a trabajar conjuntamente. "Esta acción permanecerá en el tiempo hasta que el Gobierno reciba al sector", ha añadido el colectivo en un comunicado".
Las reivindicaciones del sector se focalizan en la concreción de un plan estratégico de relanzamiento y reconversión sectorial, así como mayor claridad y transparencia al Gobierno para poder planificar la reapertura del sector y que se aplique el criterio de distancia de seguridad para determinar el aforo de los establecimientos en la desescalada.
Medidas económicas necesarias
En términos económicos, se reclama:
- la creación de una mesa negociadora para definir la flexibilización de los ERTEs, con el objetivo de conseguir una prórroga para el sector.
- microcréditos, en torno a 25.000 de rápida concesión, así como nuevas líneas de financiación, puesto que “las líneas ICO no son suficientes para el perfil de establecimiento hostelero que impera en nuestro país, compuesto principalmente por pequeñas empresas, micro pymes y autónomos”. En este sentido, solicitan la ampliación de las líneas de avales y préstamos al 0% o 0,25% sin condiciones.
- suspensión de los alquileres o rentas por causas de fuerza mayor desde la fecha de entrada en vigor del Estado de Alarma, y que se adecúe una renta variable y ajustada en función de las fases de reincorporación a la actividad al menos hasta diciembre de 2020. Además, solicitan la prórroga en el pago de las hipotecas.
- Las exenciones fiscales y de tasas municipales por el periodo de inactividad son otras de las demandas más repetidas desde el comienzo de la crisis, así como la del IVA súper reducido, siguiendo el ejemplo de otros países, como Alemania, donde se ha reducido del 19% al 7%.